jueves, 15 de agosto de 2013

KITSUNE EL ZORRITO FRANCES

Hace años que conocí, esta disquera/tienda francesa, por medio de Itunes, primero escuchando sus compilados que me parecieron distintos y con un sonido que mezclaba sintetizadores antiguos con timbres contemporaneos, luego descubrí que tenían página y que creaban ropa. Ahora que entiendo de que se trata, encuentro que es un sueño propio hecho por otros y sigue siendo inspirador, son  unos franceses amantes de la música y la ropa. Que atinado mezclar estas dos formas de expresión que siempre crean tendencias. Conozcan sus discos, las bandas que surgen desde ahí, y toda le buena energía que tira este zorrito kitsune.


                                             www.kitsune.fr

Si una marca es discográfica y tienda a la vez, lo lógico es que si presenta una colección de ropa lo haga con un desfile/concierto. Y eso es, precisamente, lo que preparó la firma/boutique/sello parisinense Maison Kitsuné para mostrar sus prendas femeninas de la colección primavera-verano 2013 dentro de Pitti, una de las ferias textiles más importantes de Europa que se celebra esta semana en Florencia.

En una impresionante sala del Palazzo Capponi, Gildas Loaëc y Masaya Kuroki, fundadores de la marca, mataron dos pájaros de un tiro convirtiendo en modelos a dos de los artistas de su sello -las suecas Saint Lou Lou y los británicos Citizens!- junto a las francesas Yelle, artífices del hit A Cause Des Garçons. No hubo desfile en el sentido literal de la palabra. Los músicos actuaron ataviados con la colección y solo durante el último tema de Citizens! cuatro modelos saltaron al improvisado escenario cual groupies. O esa era al menos la intención.
Desde el reducido número de propuestas presentadas hasta la fórmula escogida para hacerlo (la actuación se repitió en dos sesiones para que el aforo fuera más íntimo), todo rezumaba ese aire de despreocupada exclusividad que Loaëc y Kuroki buscaron imprimir a sus productos, ya sean discos o chaquetas, desde que fundaron Maison Kitsuné hace ya una década.


La idea de este atípico proyecto bipolar les surgió, según cuentan, durante un viaje a Japón con Daft Punk. Si les gustaba la música y la moda por igual por qué no unir ambas bajo una misma filosofía. Y con esta premisa abrieron su tienda en París. Un espacio en la Rue du Richelieu, junto al Palais Royal, que pronto se convertiría en parada de culto para entendidos. Allí, junto a sus ya famosos recopilatorios discográficos, desarrollaron una marca textil que resulta sorprendentemente clásica en comparación con sus mucho más arriesgados fichajes discográficos. Aunque tienen en común lo fácil que ambas resultan de digerir sin dejar indiferente al paladar. 
Su discurso estético, asegura Kuroki, gira en torno a la calidad de los tejidos y el patronaje. Y se podría añadir que resulta comercial (como no podría ser de otra forma en la línea de una tienda) sin obviar el grado justo de pretensión hipster. El sueño de cualquier vecino de bien de Williamsburg. Quizá por eso, Maison Kitsuné abrió el año pasado otra sede en Nueva York, en los bajos del hotel NoMad, y ahora prepara el asalto a Japón (como no podría ser de otra forma en una marca que se considera de culto).


By chopoalbrecht 

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